"Mientras la situación en Líbano sigue desarrollándose, sigue siendo increíblemente difícil evaluar el alcance total de la crisis. Ayer comenzó un nuevo ataque de Israel, y parece que esta escalada persistirá por algún tiempo. La incertidumbre que rodea al conflicto nos deja inquietos, ya que nos enfrentamos a la falta de información clara sobre sus efectos en la población.

Nuestra comunidad marista está profundamente afectada por la violencia en curso, que ha causado destrucción y angustia significativas. Muchas familias se enfrentan a graves dificultades, y el sonido de las sirenas y las explosiones se ha convertido en un angustioso telón de fondo de sus vidas cotidianas. Resulta desgarrador presenciar el miedo y la incertidumbre que experimentan los niños y sus familias, atrapados en el fuego cruzado de este conflicto.

Por ahora, no podemos determinar el impacto inmediato en nuestra comunidad ni la magnitud de los daños. Es crucial que, una vez que se calmen las hostilidades, nos tomemos el tiempo necesario para evaluar la situación a fondo. Debemos analizar las necesidades de nuestra gente y estudiar cómo podemos ofrecer nuestro apoyo de manera eficaz. Nuestras instituciones maristas están trabajando incansablemente para proporcionar refugio y asistencia a los necesitados, pero la magnitud de la crisis es abrumadora.

La comunicación sigue siendo vital en estos tiempos difíciles, y nos mantendremos en contacto con nuestra red para asegurarnos de que estamos preparados para cualquier intervención que sea necesaria. Las condiciones sobre el terreno siguen siendo bastante confusas, y hay una sensación palpable de inquietud respecto a si podremos reabrir nuestro centro en los próximos días. Creo que sería prudente esperar un poco más; quizás mañana o pasado mañana tengamos más información para orientar nuestros próximos pasos.

Las fronteras están ahora muy congestionadas, y los hospitales de Damasco están recibiendo a numerosos heridos. La situación es cada vez más caótica, con muchas personas huyendo de sus hogares y buscando seguridad. Espero sortear estas dificultades y apoyar a nuestra comunidad lo mejor que pueda en estos tiempos tumultuosos. Nuestros pensamientos y oraciones están con todos los afectados por esta violencia, y seguimos comprometidos a ser una fuente de esperanza y apoyo.

Seguimos de cerca la escalada de la crisis en Líbano, donde el actual conflicto entre Hezbolá e Israel está infligiendo un sufrimiento inimaginable a la población, especialmente a los niños. En los últimos días, los intensos enfrentamientos han provocado la destrucción generalizada de edificios e infraestructuras, especialmente en las regiones del sur y en la capital, Beirut. Trágicamente, hemos visto perder la vida a innumerables niños, y miles más han sufrido heridas. El desgarrador balance de estas vidas inocentes nos recuerda con crudeza la urgente necesidad de paz y compasión en la región, ya que las familias tienen que llorar en medio del caos. "

Palabras del H.no Juan Carlos en Líbano.

Los colegios maristas, incluidos los de Beirut, se han visto obligados a suspender las clases debido a su proximidad a las zonas de conflicto. El Ministerio de Educación libanés ha anunciado el cierre de todas las escuelas y universidades hasta nuevo aviso por razones de seguridad. Aunque nuestras instituciones maristas se han visto afectadas por estos cierres, agradecemos que no hayan sufrido daños directos hasta ahora.

Nuestra iniciativa socioeducativa, el Proyecto Fratelli, también ha interrumpido sus actividades. Sin embargo, los Hermanos han optado por permanecer in situ. La comunidad, formada por Hermanos Maristas y Lasalianos, ha estado trabajando junta desde 2016 para apoyar a las poblaciones vulnerables y refugiadas en el Líbano. El Proyecto Fratelli es el más cercano de nuestros programas a la zona de conflicto, y existe un plan de evacuación detallado en caso de que los Hermanos necesiten salir por su seguridad. Los bombardeos continúan a diario y las carreteras están congestionadas, ya que muchas personas huyen de la violencia. Algunos buscan refugio en escuelas, mientras que otros han huido hacia Siria.

La situación sigue siendo inestable y es difícil predecir cómo se desarrollará. Seguimos comprometidos a apoyar a nuestras escuelas, estudiantes y personal durante estos tiempos de incertidumbre. Nuestros pensamientos y oraciones están con todos los afectados por la violencia, y esperamos un rápido retorno a la paz.

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